El acero se usa en la construcción como estructura resistente, en
forma de redondos para armaduras, para componentes mecánicos
y como material de revestimiento. El acero puede ser al
carbono o en diversas aleaciones; el acero inoxidable es un tipo
de aleación. Las propiedades más importantes del acero son su
dureza y su resistencia.
La resistencia a la rotura es importante
para evitar roturas frágiles.
Las propiedades del acero dependen de su composición y
estructura químicas. El acero es tratado térmicamente para
aliviar sus tensiones internas y mejorar su soldabilidad, resistencia
y dureza a la fractura.
El hormigón puede tener una resistencia a la compresión
considerable, pero para que adquiera una resistencia a la tracción
aceptable precisa de la unión con barras y mallazos de
refuerzo. Estas barras suelen tener un alto contenido de
carbono (0,40 %).
El acero al carbono o acero “suave” contiene manganeso que,
cuando se desprende en los humos de la soldadura, puede
causar un síndrome parecido al mal de Parkinson, que puede
dar lugar a un trastorno nerviosos paralizante. En ciertas condiciones,
el aluminio y el cobre también pueden ser nocivos para
la salud.
Los aceros inoxidables contienen cromo, que aumenta la resistencia
a la corrosión, y otros elementos de aleación, como níquel
y molibdeno.
La soldadura del acero inoxidable puede exponer
a los operarios a vapores de cromo o de níquel. Algunas formas
de níquel pueden causar asma y cáncer; algunas formas de
cromo pueden causar cáncer y problemas de sinusitis y “perforación
nasal” (erosión del septo nasal).
Después del acero, el aluminio es el metal más comúnmente
usado en la construcción, debido a que tanto el metal como sus
aleaciones son ligeros, fuertes y resistentes a la corrosión.
El cobre es uno de los metales más importantes en ingeniería,
por su resistencia a la corrosión y su elevada conductividad
térmica y eléctrica. Se usa en líneas de transporte de energía,
como recubrimientos de paredes y cubiertas y para tuberías.
Cuando se usa como revestimiento de cubiertas, las sales de
cobre arrastradas por la lluvia pueden ser nocivas para el
entorno.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario